Nos enseñaron a tener paciencia
nos enseñaron a no andar descalzos
nos enseñaron a morir de viejos
nos enseñaron a vivir a plazos
nos enseñaron a guardar silencio
nos enseñaron a temer la noche
nos enseñaron que el placer es malo
nos enseñaron a crecer a golpes
nos prohibieron las cosas más hermosas
ir al campo a robar brevas
bañarnos en el verano con las mozas en la alberca
y crecimos enfermizos faltos de aire y de besos
llena la piel de preguntas que contestaba el silencio
pero apareció la vida cuando moríamos de sed
era una fuente su cuerpo que invitaba a los sedientos
a beber, a beber.probamos la dulzura de la carne
supimos que aún estábamos a tiempo
nos hartamos de besos, de manzanas,
declaramos la guerra al sufrimiento
nos quitamos la vieja piel a tiras
renegamos de todo lo sabido
prometimos pecar a manos llenas
nos hicimos más tiernos y más niños
ahora, cada día tiene su fruto
cada noche su secreto
y el tiempo es una mentira
que han inventado los viejos
al arrancarnos las vendas
que nos negaban el cuerpo
descubrimos el presente
que es lo único que tenemos
y cantaremos la vida y no abriremos la puerta
a la muerte mientras dentro del cuerpo quede una gota
de deseo, de deseo.
A todos los amigos gracias por la compañia, la paciencia, el silencio, la palabra, la complicidad, la alegría, la pena, los buenos momentos, los brindis (con lo que fuera que cayera en el vaso), a los que pagaron el vino, a los abrazos fraternos, a las chicas y sus besos, a todos mis amigos y amigas. Gracias por acompañarme hasta el último peldaño de mi segundo piso!!!!